“Te odio y te quiero”: las finanzas personales en tiempos de pandemia

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Por: Leobardo Rodríguez

Una de las preocupaciones a las que con mayor frecuencia se refiere en estos días de Covid 19 en los sondeos de opinión es la incertidumbre de cómo se comportará la economía en los próximos días. Ya no se habla de los riesgos en el mediano y largo plazo; la pandemia ha provocado que los horizontes de crisis sean de muy corto plazo, para muchos, del día a día.

El reto es que la Nueva normalidad pronto empiece a reactivar el ciclo productivo no sólo de México, sino del mundo entero. El cierre de diversos sectores de la economía ha provocado la pérdida de millones de empleos; el consumo agregado también ha mostrado una desaceleración prolongada, la gente compra menos, tiene menos o nada de dinero para consumir, o tiene miedo a salir de casa.

En este escenario, los llamados bestsellers de las finanzas personales retoman una dimensión masiva: la gente se descubre en la búsqueda exhaustiva de ideas, planes, estrategias, recetas, listas, lo que sea para subsistir a la inminente crisis económica. Títulos como Piense y hágase ricoQuerido dinero, te odio y te quieroDiario de una oveja financieraEres un chingón haciendo dinero o Padre rico, padre pobre, representan una posibilidad para descubrir una brújula que les ayude diseñar una idea para generar ingresos.

Lo cierto es que las crisis económicas que tienen las características de la actual se constituyen con el concurso de diversas variables, muchas de ellas estructurales, que escapan a los esfuerzos de los actores que hoy toman las decisiones (económicas, financieras y políticas); otras, coyunturales: ¡quién se iba a imaginar que íbamos a vivir una pandemia como ésta!

A eso hay que sumarle que el debate público sobre la función económica de los gobiernos está demasiado polarizado: los que hasta enero eran amantes del mercado y neoliberales por excelencia, hoy claman por políticas de rescate 100% keynesianas, ¡todo es responsabilidad del gobierno!; y los que siempre han sido keynesianos, piden a los neoliberales que sean congruentes y se mantengan en sus posturas históricas de mantener al gobierno al margen de todo. La única verdad es que resulta imperativo que los gobiernos del mundo aceleren la ejecución de sus obligaciones institucionales en los diversos procesos de reactivación económica y de apoyo a los sectores productivos, cada cual en su respectivo orden de responsabilidad y que los apoyos se focalicen de manera prioritaria en los que menos tienen, igual que antes; por el bien de todos, primero los pobres.

Y es en este complicadísimo contexto que hay otro sector de la población que piensa en cómo blindar sus finanzas personales y familiares. Se ha vuelto prioritario diseñar planes de contingencia financiera que den estabilidad a estos tiempos de turbulencias.

De todos los títulos que mencioné en párrafos anteriores, todos súper éxitos de ventas, quiero recomendarles el de Sonia Sánchez-Escuer, una bloguera que desde hace varios años ha enfocado sus esfuerzos en explicar el complicado mundo de las finanzas personales, publicando en 2012 bajo el sello de editorial Planeta, su famosísimo Diario de una oveja financiera.

A través de la metáfora de una oveja que se sienta a reflexionar sobre temas de dinero, plantea una idea de cómo tener una mejor relación con el dinero empieza reflexionando sobre diversas razones por las cuales éste siempre será insuficiente y plantea posibles soluciones. Si gastas demasiado en cosas poco necesarias, prueba dejar de comprar esas cosas durante 15 días, anótalas y después de ese tiempo valora si es necesario volver a gastar en ellas. Si crees que no, ganas dinero suficiente; prueba explorando tareas adicionales o de emprendimiento; las deudas comen y las deudas con intereses son un barril sin fondo, por eso antes de adquirir créditos hay que analizar a fondo los costos y las posibilidad de pagarlos; si gastas mucho, prueba reduciendo los gastos al mínimo; mantén un orden escrupuloso de todos tus gastos y en estos tiempos de pandemia procura evitar los consumos superfluos y asume una postura responsable con el dinero que llega a nuestras manos.

Diario de una oveja financiera es una excelente guía para ordenar las finanzas personales; para mantener una buena relación con tu dinero y crear planes de contingencia ante todos los riesgos que enfrentamos y estamos por enfrentar. Además de lo que propone Sonia Sánchez-Escuer, sumaría que promovamos el consumo local y cercano: si alguien de nuestros conocidos está vendiendo algo que es necesario para nosotros y aporta valor, hay que comprarle o, como dicen en mi colonia, “hay que hacerles el gasto”. Son tiempos que requieren solidaridad y compromiso para que juntos salgamos de ésta.

Pd. Ha llegado la temporada de osos a Nuevo León y se han viralizado los avistamientos de estos mamíferos que han causado terror entre los que invaden sus espacios naturales; no olvidemos que la casa es de ellos y ahora los que se han cruzado en su camino han tenido que bailar al ritmo del baile del oso. ¡Qué miedo!