Padres de familia no mandan a sus hijos a clases presenciales

695

En municipios como Tlalnepantla, Cuautitlán Izcalli, Naucalpan, Coacalco y Ecatepec las escuelas lucieron sin alumnos.

El miedo a que sus hijos se contagien de COVID-19, los casos recientes en la Ciudad de México y el hecho de que las vacaciones escolares inician en tres semanas inhibieron a los padres de familia para llevar a sus hijos a las escuelas del Estado de México.

Tampoco pesó el hecho que desde el pasado viernes el gobierno mexiquense dio a conocer los protocolos para el regreso seguro a clases presenciales, como evitar aglomeraciones, escalonamiento de horarios, el uso obligatorio de cubrebocas, sana distancia, lavado de manos, uso de careta e implementación de tres filtros sanitarios para entrar a las escuelas.

Ni los 18 mil comités participativos de salud escolar fueron suficientes para que los mentores tuvieran la confianza necesaria para dejar a sus hijos en las escuelas primarias y secundarias durante el primer día de clases presenciales tras 15 meses de pandemia.

La historia fue la misma en la mayoría de planteles educativos de los municipios de Tlalnepantla, Cuautitlán Izcalli, Naucalpan, Coacalco y Ecatepec, todos ubicados en la zona conurbada del Valle de México.

Los profesores esperaban a sus alumnos en la puerta de entrada de las escuelas. Como en el caso de la primaria Primero de Mayo, donde autoridades comentaron que padres les habían manifestado que no estaban de acuerdo con el regreso a clases presenciales y no llegó un solo alumno.

Algo similar sucedió en la secundaria Benito Juárez, en Cuautitlán Izcalli, donde con antelación los padres de familia respondieron de manera negativa a una encuesta que les realizaron por medio de redes sociales para saber si estaban de acuerdo en el regreso de las clases presenciales.

En los municipios de Tultitlán, Coacalco y Ecatepec se repitió casi la misma historia. En las escuelas del sector público que se encuentran en la cabecera municipal de Coacalco, los inmuebles escolares se miraban vacíos. Por ninguna parte se veían alumnos ni padres de familia, solo trabajadores de intendencia.

Las escuelas públicas ubicadas en la cabecera municipal de Coacalco fue la misma historia, ya que ni alumnos ni padres de familia se presentaron en los planteles para retomar las clases presenciales, solo se podía mirar a algunos trabajadores de intendencia.

En Ecatepec, las escuelas que se ubican en el centro del municipio mexiquense no se presentaron alumnos ni padres de familia, quienes al parecer ya les habían manifestado su decisión a las autoridades escolares locales.